El Síndrome de Munchausen por poderes es un trastorno en el que una persona, generalmente el cuidador o la madre del niño, deliberadamente causa lesión, enfermedad o trastorno a otra persona, generalmente el hijo. Es un trastorno psiquiátrico registrado en el DSM-V como Trastorno facticio , o artificial.
Es una forma de maltrato infantil en la que uno de los padres provoca en el niño síntomas reales o aparentes de una enfermedad.
Hay casos en las que las madres con trastorno de la personalidad narcisista, enferman a sus hijos para mantenerlos bajo su poder y así obtener su suplemento narcisista. Enfermando a sus hijos gratifican sus necesidades psicológicas de atención y dependencia.
La madre que enferma a sus hijos en apariencia es muy preocupada y abnegada, por lo que normalmente no existen sospechas de maltrato por parte de médicos u otros familiares. Los niños que sufren esta forma de abuso suelen ser hospitalizados por presentar grupos de síntomas que no encajan mucho en ninguna enfermedad conocida. O son llevados a menudo al médico por una enfermedad supuesta que la madre insiste que tienen.
Los síntomas del niño suelen mejorar en el hospital (ya que la enfermedad no existe) y siempre empeoran en casa, cuando los médicos no están presentes.
El Síndrome de Munchausen, fingir y provocar que tu hijo está enfermo, es una forma de maltrato infantil elaborada y perversa, que puede ser potencialmente mortal para el niño implicado, al margen de los posibles traumas psicológicos que le puede provocar.
La madre que es capaz de hacer que su hijo enferme, realmente ha de tratarse de una madre verdaderamente tóxica, y las víctimas que hemos sufrido su caprichoso comportamiento nunca llegamos a entender el comportamiento de nuestra propia madre.
Características de las madres que enferman a sus hijos
- Estas madres se caracterizan por su gran destreza para manipular al personal (médicos, enfermeras, trabajadoras sociales). Algunos jueces se han manifestado incrédulos a que el síndrome exista como tal.
- Sobreprotectoras con el hijo.
- Relación simbiótica con el hijo
- Con trastornos disociativos atípicos.
- Depresivas, ansiosas.
- Con gran capacidad de invención.
- Agresividad.
- Con trastorno límite de la personalidad.
El DSM-IV (Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales) propone los siguientes criterios de investigación para el trastorno ficticio por poderes:
- Producción o simulación intencionada de signos o síntomas físicos o psicológicos en otra persona que se encuentra bajo el cuidado del perpetrador.
- La motivación que define al perpetrador es el deseo de asumir el papel de paciente a través de otra persona.
- No existen incentivos externos que justifiquen este comportamiento (por ejemplo, una compensación económica).
- El comportamiento no se explica mejor por la presencia de otro trastorno mental.
El pediatra Roy Meadow, a principios del siglo 20, quien acuñó el término Síndrome de Munchausen, después de estudiar a numerosos niños en el hospital, llegó a la conclusión de que quien genera un trastorno fictício por poderes no responde a un cuadro psicótico ni alucina mientras enferma a sus hijos.«Los padres y sobre todo la madre, inventan, falsifican o producen de manera voluntaria síntomas al niño, con la finalidad de gratificar las necesidades psicológicas de atención y dependencia de ellos mismos».
Los síntomas son provocados por el adulto con intencionalidad, voluntariedad y la ausencia de un beneficio consciente y la falta de control sobre su conducta (sus actos son compulsivos, sus manipulaciones son conscientes, no así sus motivaciones).
A todas luces se trata de una modalidad de maltrato al niño, en la medida en que las acciones del adulto le provocan un daño real o potencial, con alteración de su desarrollo integral.
Si de pequeña estabas enferma más de lo que crees deberías, y con ello te quedabas en casa asilada, lo más probable es que tu madre tuviera el Sindrome de Munchausen.