Cuando vives en una relación con alguien con trastorno narcisista, es horrible soportar el juego de que un día te odian, y al siguiente no pueden vivir sin ti.
El problema es que cuando dicen que te quieren terminas creyéndote que pueden cambiar y ser la persona maravillosa que conociste al principio de la relación, cuando te bombardeaba con su amor. (love bombing)
Pero, siempre vuelve a las andadas y después de la calma llega la tormenta y de nueva parece te vuelve a odiar.
Este juego continuo de darte amor y luego robartelo te deja rota, es lo que se llama el vínculo traumático, que desgraciadamente hace que te quedes en la relación más tiempo del aconsejable esperando que vaya a cambiar.
Si tratas de decirle cómo te sientes cuando te odia, tu vulnerabilidad le hace sentirse aún más poderosa. Es suplemento narcisista para esa persona.
A una persona como tú le es difícil entender cómo alguien puede hacer daño a otra, porque tú no lo harías y no importarle. Tu empatía puede que te empuje hasta tratar de justificar lo que hace y ayudarle. Pero déjame decirte que tu bondad no van a cambiar ni a tu madre o a tu pareja abusadora.
Tienes que entender que cuando la persona narcisista trata de ser amable contigo, y sacar su mejor cara, es también parte de su ciclo del abuso.
Ya que así es como se crea el vínculo traumático con ellos. Las personas narcisistas tratan de darte algo bueno, porque saben que así te quedas a su lado para ser su permanente suministro narcisista.
Por eso no te dejan ir, para poder seguir obteniendo ese suplemento narcisista, esa droga que necesitan para vivir y tapar su herida narcisista.
Una vez eres consciente del juego, de darte y quitarte y de por que a pesar de mostrarte todo su rabia no te dejan ir, debes empezar a trabajar en tomar distancia para recuperar tu identidad como persona.
Puedes hacerlo!