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Etapas para sanar después de una relación tóxica con tu madre

Etapas para sanar después de una relación tóxica con tu madre

No es fácil reconocer que tu madre no te ha tratado bien, pero menos fácil ha sido tener una infancia y adolescencia donde nunca has encontrado  tu espacio y no sabías quién eras en realidad.

No es fácil llegar a una edad adulta con miedos, con poca seguridad en ti misma, y con una vida que parece te cuesta el doble que a los demás.

Pero una vez que descubres que tu madre ha sido la que no te ha dejado crecer correctamente, la que te ha ido poniendo piedras en el camino, puedes empezar a ver la luz hacia tu sanación.

Haber descubierto de dónde viene tu dolor, no significa que el camino a tu total libertad sea fácil. Las heridas emocionales están grabadas en ti, son casi parte de tu ADN. Pero puedes sanar y encontrarte a ti misma.

Mucha gente me pregunta qué hacer para sanar.

La respuesta es que la sanación está en tus manos.

Tú decides si estás dispuesta a luchar un poco más en esta vida y convertirte en una superviviente (puedes hacerlo, ya que siempre has sido una guerrera, llevas peleando por tu supervivencia toda una vida), o prefieres quedarte en tu zona de confort, pero con dolor.

Sí para sanar vas a sentir dolor al principio. Ver lo que te han hecho y reconocer tus heridas duele. Pero es el camino, el primer paso. Estás dispuesta a darlo y pelear como siempre lo has hecho, o estas mas cómoda siguiendo como víctima, quejándote de lo mal que te han tratado y de lo injusta de la vida. La vida es bella, pelea un poco mas y disfrútala.

“Amurallar el propio sufrimiento es arriesgarte a que te devore desde el interior”. Frida Kahlo

Date la oportunidad de encontrarte a ti misma y conseguir todo aquello que te propongas. Recupera los sueños que una vez imaginaste pero que tuviste que meter en el fondo de un cajón, por seguir las directrices de tu madre.

Sueña y vive. Te lo mereces eres una SUPERVIVIENTE.

Para el proceso de sanación vas a pasar por las siguientes etapas:

  • Reconocimiento de la verdad: despertar a lo vivido e identificar cada herida que llevas en el alma (el Síndrome de la Víctima Narcisista). Ene esta etapa es recomendable escribir sobre todas tus heridas. Primero porque has de reconocerlas (no podemos sanar lo que no reconocemos tener) y segundo porque tu dolor y entender cómo tu madre ha jugado mentalmente contigo, te va a ayudar a deshacerte de la tortura de la culpabilidad.
  • Duelo: necesitas un tiempo para asimilar lo vivido. En esta etapa vas a vivir emociones contradictorias: rabia hacia ti, hacia tu madre, tristeza, dolor, fuerza,… déjate sentir, el dolor ha de salir hasta que llegues el día que lo aceptes.
  • Alejarte de la toxicidad: el llamado contacto cero. Has de estar preparada para ello. Nada de escuchar a quien te dice corre, no sé que haces ahí aguantando. No es fácil romper el vínculo traumático, y menos con una madre. Tómate tu tiempo, prepáralo y llévalo acabo cuando te sientas con fuerzas. Hay personas que se alejan durante la etapa del reconocimiento de lo vivido y otras después del duelo. También las hay las que se ven forzadas al contacto cero porque sus madres les cierran las puertas en las narices.
  • Reconstrucción Cognitiva: todo lo que has creído hasta ahora sobre ti no es cierto. No eres quien tu madre te ha hecho creer que eres. Tus pensamientos destructivos son los que crean tus emociones negativas de ansiedad, miedo, angustia, baja estima, hipervigilancia, culpa,…y hasta dolencias físicas. Has de cambiar esos pensamientos para cambiar así tus emociones y entender que de manera inconsciente sigues atraiéndolos.
  • Empoderarte: Cuando sanas, puedes reconstruir tu propia identidad. Puedes ser tú y no la persona que tu madre creó.

No pares hasta conseguir encontrar la bella mujer que eres. Saca pecho y se una superviviente. Nadie dice que sea fácil, pero eso no te va a asustar. Has vivido cosas mucho peores. Solo te queda el último paso. No te quedes más encubriendo el dolor, sácalo, sana y vuela.

Si lo deseas te puedo guiar en el camino, hacértelo más corto a través del Método RAN (recuperación del abuso narcisista). Pero por favor, camina hacia delante, sola o acompañada no te quedes donde estás. Sé capaz de mirarte al espejo y encuentra a esa bella mujer que llevas dentro.

 

Tipos de madres tóxicas o narcisistas

Tipos de madres tóxicas o narcisistas

La madre tóxica es esa madre desnaturalizada que pone sus necesidades por delante de las de sus hijos. No escatima en utilizar cualquier técnica de manipulación para conseguirlo.

Pero no todas son iguales, algunas cumplen con diferentes definiciones de tipos. Vamos a ver cómo son:

Tipos de madres tóxicas

  • Envolventes o absorbentes: no tienen ni ven límites entre ellas y sus hijas. Intentan dictar y controlar todos los aspectos de la vida de su hijas desde qué ponerse, qué decir, qué pensar. Son sobreprotectoras, manipuladoras y meten sus narices en todo . Quieren que sus hijos hagan siempre lo que ellas desean y a su manera. De no hacer lo que dicen y como lo dicen sacan su ira. Piensan que tienen derecho a intervenir en sus vidas aunque  vivan fuera del hogar y hayan creado su propia familia. Dan la imagen de madre de entrega y amor total hacia sus hijos. No les importa lo que sus hijos sientan o piensen. Todo gira en torno a sus propios deseos necesidades y la imagen que muestran a la sociedad.
  • Psicosomática: es aquella que usa las enfermedades, achaques y dolores para manipular a sus hijos y salirse con la suya. Con sus continuos achaques busca que le presten continua atención. Se trata de un abuso emocional que la madre inflige a sus hijos.  A través de sus enfermedades, reales, supuestas o creadas en su mente, lo que busca es el absoluto control de su hija o hijo. Si la hija no responde a las demandas, la madre se hace la víctima poniéndose más enferma, sufriendo una crisis relacionada con la enfermedad  o montando en cólera acusándole de que no se ocupa de ella como debiera. Todas las tretas son pocas para redirigir la atención de la hija y hacerle sentir culpable. (puedes leer más sobre este tipo aquí).
  • Negligentes: son las madres que no tienen ningún interés en sus hijos. No se ocupan ni de las necesidades básicas de los mismos.  Suelen ser adictas a sustancias (alcohol o drogas) o  aquellas que son excesivamente débiles y dependientes (madres con depresión,…) que terminan siendo ellas las que tienes que ser cuidadas por sus hijos. Normalmente son más fáciles de detectar incluso por servicios sociales al no hacerse cargo de las necesidades básicas de los hijos.
  • Instrumental: según David Elkind, (1991) el «narcisismo instrumental» es un síndrome que a menudo se manifiesta por narcisistas parentales encubiertos o hipervigilantes. Estas madre invierten toda su energía en sus hijos en un intento de crear un genio o una obra maestra. Ellas se ven a sí mismas como menos que sus hijos , por lo que tratan de elevar su autoestima y estatus a través de los logros de sus hijos. Aunque estas madres pueden ser bastante tímidas, seguirán impulsando a sus hijos a la luz pública para brillar en su nombre. Si el el niño es criticado o herido de alguna manera, estos madres sentirán vergüenza y humillación en respuesta. Son incapaces de discernir la experiencia del niño de la suya.

Da igual en que tipo encaja tu madre, o si cumple incluso con todas las descripciones. Lo duro es que estas madres no dejan que sus hijos crezcan emocionalmente. Te destrozan la infancia y la adolescencia creando adultos rotos que tenemos que sobrevivir con heridas emocionales (ansiedad, miedo, baja estima, hipervigilancia,…) que nos dificulta tomar decisiones adecuadas en la vida y nos hace que en la vida nos cueste casi hasta respirar.

Pero si tu caso es el haber tenido una madre castradora, decirte que hay vida después de ella. Puedes conseguir una reestructuración cognitiva para que los fantasmas del pasado dejen de visitarte y tener una vida sana y feliz. Y lo más importante: puedes encontrarte a ti misma, a esa mujer que tu madre nunca dejo ser.

Camina, no pares hasta sanar, y encuentra la mujer maravillosa que llevas dentro. Déjala volar.

Cómo es una madre tóxica o con trastorno narcisista de la personalidad

Cómo es una madre tóxica o con trastorno narcisista de la personalidad

La madre tóxica o con trastorno narcisista de la personalidad es esa madre desnaturalizada que en lugar de apoyar a sus hijos para que crezcan sanos emocionalmente, sepan batallar la vida con valentía y dispongan de las herramientas necesarias para tomar las decisiones adecuadas, es esa persona que ahoga infancias y crea personas rotas.

La madre tiene un rol fundamental en la crianza de los hijos y la familia es la encargada del adecuado desarrollo emocional de los hijos. Cuando estos no reciben el adecuado cuidado emocional sufren heridas que se siguen acarreando en la edad adulta y que son difíciles de sanar.

Pero vamos a centrarnos en cómo son las madres con trastorno narcisista de la personalidad.

Las Madres Tóxicas o Madres con Trastorno Narcisista de la Personalidad, tienen los rasgos característicos de las personas con Trastorno Narcisista de la Personalidad que acabas de leer. Pero como madres, tienen algún comportamiento específico, sobre todo con sus descendientes.

Aunque trataré de enumerar aquí que les caracteriza y los comportamientos más propios de estas madres tiranas, en resumen, creo que se trata de personas que te tratan como si todo fuera culpa tuya y como si no valieras nada. Un tornado que arrasa una familia y la deja destrozada.

Vamos a ir viendo sus principales características. Recuerda que tu madre no tiene porque cumplir con todas. Cuantas más características sean aplicables a ella, su grado de toxicidad será mayor.

Características de una madre tóxica
Falta de empatía emocional

Es su principal característica. La empatía emocional es la capacidad de sentir lo que otra persona está sintiendo (o lo que crees que la persona está sintiendo). Tener empatía emocional disminuye la probabilidad de que quieras lastimar a los demás, porque literalmente sentirás algo de su dolor.

Sin empatía emocional, tu madre no presta atención al dolor que sus palabras y acciones te causan.

Que no tenga Empatía Emocional no significa que no tenga Empatía Intelectual (es la capacidad de comprender cognitivamente que estás causando dolor a otra persona).

La madre narcisista o tóxica, por lo tanto, puede entender que puede estar causando dolor a sus hijos, pero no presta atención a ello, no le importa. No establece un vínculo maternal con sus hijos, es carente de toda ternura que se le presupone a una madre.

No tiene conciencia

La conciencia se define como el conocimiento que un ser tiene de sí mismo y de su entorno. También puede referirse a la moral o a la recepción normal de los estímulos del interior y el exterior.

La conciencia moral es lo que nos hace humanos, ya que es una característica específicamente humana.Tu madre no tiene esta conciencia moral, aunque como verás más tarde es consciente de lo que hace.

Carece de autoestima

La autoestima es el conjunto de sentimientos que se tiene de uno mismo. Tu madre, no se adjudica un gran valor a sí misma. Y para tapar esta falta de autoestima, te utiliza a ti como forma de cubrir sus carencias y necesidades.

Para evitar quedarse sola, te transmite la falta de autoestima e inseguridad, haciéndote dependiente de ella. Es una persona insegura, miedosa,… justo lo contrario de lo que aparenta ser.

Tiene extrema vanidad

No todas son igual de superficiales, algunas lo muestran mucho más claro que otras. Las hay que se esconden bajo una apariencia de persona sencilla y buena. Pero a otras muchas les encanta mostrarse altaneras. Lo hacen en cómo visten o en mostrándose inteligentes ( o es lo que ellas creen), sus opiniones sientan dogma.

Está celosa de ti

Su envidia es muy visible. Tratará de convencerte de que algo no te sienta bien, no te dejará maquillarte,… no puedes brillar más que ella. Los demás no pueden reconocer tu valía. 

Llega al extremo de intervenir en tu matrimonios o pareja, y en cómo crías  a tus hijos. No soporta que hagan nada mejor que ella, ni que seas más feliz que ella. Te quiere mucho, pero infeliz y a su lado.

 Es mentirosa

La madre tóxica es muy calculadora, y para que nadie se de cuenta de su maldad miente . Te miente a ti para controlarte, pero miente a los de fuera especialmente sobre ti para ella aparecer como la buena madre. Antes de que tú puedas decir nada a nadie, los que están alrededor tuyo ya saben cosas sobre ti. 

Miente para presentarte como la mala y la loca y socavar tu credibilidad. Miente para prevenir que tú puedas destapar su verdad, siendo tu la mala y no ella. Intenta parecer una madre abnegada y sacrificada, y quiere que los demás la vean así. A mi me gusta verlas como geniales actrices. Podrían ganar un Oscar por su gran interpretación de madres entregadas, cuando en realidad son todo lo contrario.

Es excesivamente controladora

Para la madre tóxica, control es sinónimo de seguridad, de algo permanente que no cambia, y lo que no cambia es bueno porque le hace sentir bien.  Practica la sobreprotección llevada al extremo. No acepta las saludables expresiones de individualidad infantil; quiere que su hija sea como ella, llegando a enojarse y castigarla arbitrariamente si muestra intereses u opiniones diferentes a las suyas. 

Preocupada excesivamente por sus hijos, da una imagen de entrega y amor totales. No le importa lo que sientas o pienses, todo gira en torno a sus propios deseos y su propia imagen social.  Es agresiva y desvergonzada. No pregunta. Demanda. No acepta un no por respuesta. Te manipula o desata su ira para conseguir lo que quiere. Se cree con derecho a todo, en casa y fuera. Siempre tiene razón y no tolera las críticas.

Su comportamiento puede ser patético

Cuando la confrontas de manera que ya no hay vuelta atrás porque has descubierto todos sus juegos, se sentirá perdida. Actuará sin pensar, dirá que no puede hacer nada bien, aparecerá como una mártir. Pero lo que nunca hará es responsabilizarse de sus actos.

Perderá el increíble control que siempre has visto en ella y su ira le hará actuar de manera irracional . Se convertirá en una víctima y se echará a llorar, diciendo que no sabe hacer nada bien. (Si intentas consolarla te acusará de ser tú la mala), o sacará toda su ira descontrolada. Se le caerá la careta, no pensará e intentará hacerte daño sin pensar en sus consecuencias.

 La madre tóxica tiene miedo patológico a no ser respetada, amada o valorada

Te usa a ti para llenar su necesidad emocional de ser importante. Lo hace encubiertamente, a través de la manipulación emocional.(luego vas a ver los tipos de abusos que utiliza).

Es un vampiro emocional

Y por último, tu dolor le alimenta. Tu dolor, el verte sola, aislada, sufriendo,…le produce satisfacción. Además de estas características que habrás podido reconocer en tu madre, ella puede también tener otros trastornos de personalidad.

Las madres con Trastorno Narcisista de la Personalidad (DSM-IV código 301.81), también poseen a veces otros trastornos de tipo B, como

  1. Trastorno antisocial de la personalidad (DSM-IV código 301.7): generalizada indiferencia por los derechos de los otros.
  2. Trastorno Límite de la Personalidad (DSM-IV código 301.83): afección mental por la cual una persona tiene patrones prolongados de emociones turbulentas o inestables.
  3. Desorden Histriónico de la Personalidad (DSM-IV código 301.50): es un patrón general de excesiva emotividad y una constante búsqueda de atención.

 

Una madre tóxica es una persona herida. Sus heridas son multigeneracionales, han ido pasando de madre a hija generación tras generación. 

Tu madre ha proyectado sus heridas en ti. Ahora tú puedes parar este círculo, ver las heridas, ser consciente de ellas para poder sanarlas y ser quien realmente eres: una mujer maravillosa que tu madre no dejo ser, pero que ahora puede brillar.

 

 

 

 

Compartimentalización. Mecanismo de defensa  tras el abuso narcisista

Compartimentalización. Mecanismo de defensa tras el abuso narcisista

La compartimentalización es un mecanismo de defensa que como víctima del abuso narcisista empleas para defenderte de las emociones o pensamientos que te producen ansiedad o disminuyen tu autoestima.

La compartimentalización es el proceso mental de mantener las cosas separadas para evitar sentimientos desagradables. Es un mecanismo de defensa psicológica inconsciente que nuestras mentes utilizan para lidiar con puntos de vista internos conflictivos.

Cuando un individuo compartimentaliza sostiene dos o más ideas, actitudes o comportamientos que están esencialmente en conflicto sin reconocer la contradicción entre ellas.  

Tú como víctima de los abusos de tu madre o pareja, compartimentalizas. Es como que guardas en un cajón aparte ciertos sentimientos para que no te hagan daño y puedas seguir viviendo.

Separar mentalmente aspectos de nuestras vidas puede darte apariencia de armonía, ya que alivia temporalmente la tensión . Pero en realidad esa supuesta consistencia es a menudo falsa o incluso dañina para ti.

La compartimentalización es algo habitual entre las personas con adicciones. La persona que lucha contra la adicción generalmente tiene una gran evidencia de cómo el alcohol o las drogas están dañando su vida. Sin embargo, seguirá considerando estas sustancias como soluciones a sus problemas, en lugar de la causa. Estas dos creencias están en contradicción directa, y el deseo de aliviar la tensión mental les lleva a culpar de sus problemas a otros factores no relacionados con el abuso de sustancias.

En tu caso, víctima del abuso psicológico por parte de tu madre tóxica, te ocurre lo mismo en tu mente.

Te enfocas en las partes positivas de la relación con tu madre, separándolas de las partes abusivas e ignorándolas.

Te quedas con el «me ha comprado algo, me ha pagado los estudios, …» y metes es en el cajón del no me afecta «nunca he recibido un abrazo suyo, nunca me ha dicho que hago nada bien, sus insultos, sus no sirves, no vales…» Este tratar de que lo malo no te haga daño, te sigue destruyendo y manteniéndote “enganchada” a tu madre aún si te has separado de ella.

 

Perspecticidio.  Lavado de Cerebro

Perspecticidio. Lavado de Cerebro

El perspecticidio es  una de las técnicas de manipulación más peligrosas ya que consiste en cambiar la manera que la víctima tiene de percibirse.

Evan Stark,  investigador y profesor en la Universidad Rutgers, fue el primero en utilizar el término “perspecticidio” en 2007 en su libro “Control Coercitivo” .

La palabra “perspecticidio” se ha utilizado para hacer referencia al lavado de cerebro al que se sometían los prisioneros de guerra y su uso se está extendiendo en la psicología para hacer referencia al lavado de cerebro de una persona abusadora a su víctima.

El objetivo del perspecticidio es lograr una pérdida total de identidad en la víctima. El narcisista no quiere que pienses por ti misma, tratará como sea de borrar tu identidad.

El perspecticidio siempre implica una relación abusiva, de control y/o manipulación, de manera que con el paso del tiempo el narcisista cambia la forma de pensar y verse de su víctima.

Así el abusador narcisista termina definiendo tu mundo. El narcisista define qué es el amor, cómo debe de ser la relación contigo e incluso cómo debes de pensar o vestir.

Ejemplos de perspicticidio más comunes son:

– Decidir cómo la víctima debe invertir su tiempo.

– Control obsesivo sobre cada detalle cotidiano.

– Fijar los términos de la relación. El narcisista somete a su víctima imponiendo sus reglas y su visión de cómo debe ser la relación.

– Cambio del autoconcepto. El narcisista se asegura de “robarle” a la víctima el autoconcepto , colocando el suyo en su lugar. De esta manera, la percepción de la víctima cambia, quien comienza a verse con los ojos de la otra persona.

El narcisista decide sobre su víctima, cómo tiene que vestirse, qué trabajo ha de tener o cómo tiene que comportarse.

En definitiva tu madre te ha dicho qué hacer, qúe decir y pensar, cómo debes vestirte, qué debes opinar, qué debes estudiar, …. hasta el punto que no sabes quien eres. Ha borrado, o más bien no ha dejado que tengas una identidad propia.

Con el perspecticidio, tú, la víctima pierdes tu propia identidad. “Yo decido qué haces y cuando lo haces”, ¿te suena?

Y cómo encontrar a esa mujer que tu madre reprimió

Las heridas emocionales que nos quedan a las víctimas son muchas y conforman el SÍNDROME DE LA VICTIMA NARCISISTA (puedes encontrar aquí las 23 heridas emocionales). Pero ahora que has descubierto que tu madre no te ha tratado cómo debiera, está en ti pelear por ser una SUPERVIVIENTE.
Has dado el primer paso, abrir los ojos a la realidad de lo ocurrido. Eso duele, pero te aseguro que puedes sanar y vivir una vida sin miedos. Creyendo en ti.
Solo tienes que reconocer primero tus heridas ( no podemos curar lo que no conocemos), entender que eres adicta a tus emociones, para poder con un cambio cognitivo empoderarte y encontrar a esa mujer fuerte y maravillosa que tu madre no dejó aflorar.

NO DEJES NUNCA DE LUCHAR HASTA ENCONTRARTE Y SER FELIZ

Crecer sin amor deja cicatrices. Amor y aprobación, la mejor medicina para tus hijos

Crecer sin amor deja cicatrices. Amor y aprobación, la mejor medicina para tus hijos

Cuando creces sin amor y sin el apoyo emocional necesario en casa, te conviertes en un ser perdido lleno de dolor y sin un rumbo en la vida.

A veces tanto de niño como de adulto ese dolor es tan profundo que no sabes como canalizarlo y lo sacas en forma de lágrimas y tristeza o en forma de rabia hacia los demás.

Da igual lo que hagas ni como lo hagas, nunca está bien. Por más que te esfuerces, nunca haces nada bien.

Te quedas siempre esperando un buen gesto, un «está bien»,… migajas. Pero nada, nunca recibes nada más que indiferencia.

Cuando siempre te recriminan lo que haces, creces con pánico y creyendo que todo lo haces mal, que no vales para nada. Esto es justo lo contrario de lo que un niño necesita.

Un niño necesita amor, aprobación y validación para tener confianza en sí mismo y atreverse con todo.

Pero no solo los humanos necesitamos amor. Estos días he tenido la suerte de experimentar que el amor y la validación nos dan fuerzas a todos y nos hacen calmarnos y sentirnos mejor. Todos los seres en este planeta necesitan el apoyo de su familia, y creo que excepto los reptiles, especie carente de neocórtex, y por ello carentes de afecto materno (sus criaturas tienen que esconderse para no ser comidas por la madre), las demás especies animales cuidan de sus hijos.

Hemos añadido un miembro a la familia. Un perrito que no había recibido el amor necesario para ser feliz. Y claro el pobre tenía miedo de que le acariciaran, no se dejaba abrazar, estaba agresivo con su otro hermano de cuatro patas y todavía le cuesta socializar. ¿No os suena haber sido así, un poco como mi ya inseparable Jambo? Sin el amor de tu madre, no sabes como amar y a veces te cuesta recibir amor.

Paremos el círculo de la toxicidad, de la falta de amor, para criar niños fuertes, amados y seguros de si mismos. Amemos y validemos a los niños para que nunca más tenga nadie que sentirse solo vacío, o necesite llamar la atención con su ira mal gestionada.

Amar a vuestros hijos, a vuestros animales, darles las herramientas necesarias para que se desenvuelvan en la vida y puedan hacer todo aquello que se propongan. Validarlos, apoyarlos.

Pero sobre todo amar a vuestros hijos para que puedan ser FELICES.

La falta de amor en la infancia crea resentimiento y  heridas emocionales que llevan mucho trabajo curar. Heridas tan profundas que muchas veces las victimas deciden no afrontar y curar y pasan por esta vida sin conocer la felicidad y lastimándose a sí mismos y a los demás.

AMA a tus hijos, diles cuanto les quieres, diles que bien hacen las cosas, repíteles que guapos están, abrázales, anima a tus hijos a hacer lo que les guste.

Ama a tus hijos y ayuda a crear un mundo feliz. No permitas que tus hijos crezcan inseguros, con miedos, con dolor, depresiones, ansiedades. Dales la mejor medicina:

Aprobación y amor crean adultos fuertes capa de todo en esta vida.

Si no veamos el ejemplo de Thomas Edison que de niño su maestro le dio una nota para su madre.

«Mi maestro me dio esta nota y me dijo que sólo se la diera a mi madre.» Cuando ella leyó, en voz alta, a su hijo la carta que él le trajo, sus ojos estaban llenos de lágrimas. Ella leyó: • «Su hijo es un genio, esta escuela es muy pequeña para él y no tenemos buenos maestros para enseñarlo, por favor enséñele usted». Muchos años después la madre de Edison falleció, y él fue uno de los más grandes inventores de los siglos XIX y XX. Un día él estaba ordenando algunas cosas antiguas de la familia. Repentinamente vio un papel extraño doblado con un dibujo en el escritorio. Él lo tomó y lo abrió. En el papel estaba escrito: • «Su hijo está mentalmente enfermo y no podemos permitirle que venga más a la escuela.» Edison lloro por horas y quedo sobrecogido. Y una vez recuperado, escribió en su diario: • «Thomas Alva Edison fue un niño mentalmente enfermo, pero por una madre heroica se pudo convertir en el genio del siglo».

El amor y validación de esa madre sacó lo mejor de Thomas. Hagamos lo mismo con todo aquel que nos rodea.

 

 

 

Madres manipuladoras y victimistas

Madres manipuladoras y victimistas

Es tan difícil ver que somos maltratadas por nuestras madres, que cuando lo hacemos nuestras heridas emocionales están casi grabadas en nuestro ADN.

Es normal no darse cuenta. Primero porque has tenido que crecer con ella y no has podido conocer otra cosa, y sobre todo porque  te ha adiestrado muy bien para que sientas adoración por ella y la obedezcas. Además te ha enseñado a sentirte culpable si no lo haces.

No te has dado cuenta porque no te ha pegado y siempre te ha dado de todo y te ha ayudado. ¿Pero lo ha hecho con condiciones?

Déjame decirte que el amor se da gratis, sin pedir ni esperar nada a cambio. Venga de quien venga el amor si es real es incondicional. Si tu madre es de las que te ha dicho te ayudo si tu haces «X» cosa, o te pones «X» cosa, tu madre ha abusado de ti, te ha manipulado.

Si durante tu vida tu madre no te ha mostrado todo lo que vales, no te ha alabado, y te ha hecho sentir que nunca eres lo suficientemente buena, te ha manipulado emocionalmente.

Y eso déjame decirte es uno de los peores maltratos que existen. Manipular la mente de un niño para que no crea en si mismo es el peor maltrato que existe porque te deja sin las herramientas emocionales necesarias para el crecimiento. Te rompe.

Un niño no validado es un adulto roto, que no cree en si mismo, que le cuesta encontrar el rumbo en la vida y que es una presa fácil para posibles relaciones toxicas. Por que, porque no sabe poner limites y esta acostumbrado al amor con condiciones y es lo que termina buscando.

Madre victimista

Si tu madre es de las que todo gira alrededor de ella, siempre se queja: «hay es que mi vida ha sido difícil, es que no he tenido suerte con tu padre, es que mi salud es delicada,….». Déjame decirte que el victimismo lo usa para manipularte. Una madre sana no hace esto.

Si estas actuaciones te resultan familiares tu madre te ha maltratado, no te ha dejado crecer emocionalmente. Si es duro, pero cuanto antes veas la realidad, antes puedes sanar y ser la mujer estupenda que eres. Nunca es tarde para que veas todo lo que vales, para empoderarte.

Por eso debes de curar tus heridas emocionales infantiles, para poder crecer emocionalmente y ser tú realmente y tomar las decisiones adecuadas que te lleven donde quieras ir.

Gracias al Método RAN©, vas a curarte.

No esperes a desplegar tus alas y vuela dejando atrás de una vez por todas ese dolor que te paraliza.

Día Internacional de la Niña

Día Internacional de la Niña

Este próximo 11 de Octubre es el Día Internacional de la Niña,  día para dar a conocer los derechos de las niñas.

Aprovecho este día para recordar que debemos ayudar a nuestras hijas a que se EMPODEREN: a que reconozcan su valor y poder.

Puede que por la educación recibida o el entorno en el que hayas vivido, a ti no te enseñaron a ver tu verdadero valor. Las chicas de la casa en muchos hogares nuestros eran las que tenían que hacer las labores del hogar, y atender a los hombres de la casa. Con lo que las niñas estaban obligadas a relegar sus necesidades.

Pero puede que no te educaras en un ambiente machista y aun así, como es mi caso no te enseñaron a valorarte. Yo crecí en un ambiente donde tanto mi hermano como yo teníamos que hacer las mismas cosas en casa y no se hacía distinción de género, pero a pesar de eso jamás escuché una voz de aprobación. Nada que me hiciera creer en mí.

Por favor aprovecha este día de la Niña para recordarle a tu hija todo lo que vale y el inmenso potencial que tiene dentro.

Muéstrale a poner sus necesidades en primer lugar, en  que crea en ella,… . Una niña que crece apoyada emocionalmente, sintiéndose protegida, segura de sí misma es capaz de todo lo que se proponga en la vida.

Qué es el empoderamiento

El empoderamiento es el proceso de aumentar tu capacidad para que  tomes decisiones y puedas transformar esas elecciones en acciones y resultados deseados. A través del proceso, te conviertes en un agente de cambio. En términos más simples, es el factor «puedo hacerlo«, el proceso para poder pasar del «No puedo» al «Puedo».

Lo enriquecedor en el proceso de empoderamiento es evidenciar el desarrollo de la confianza en tus propias capacidades, que provocan cambios sustanciales en tu forma de pensar en tus metas y desafíos.

Los factores que pueden influir en este proceso, de toma de poder de una misma, son tu familia, amigos, entorno, la educación, la experiencia… pero el fundamental es tomar consciencia de ti misma.

Por eso te animo de nuevo que en este día de la Niña comiences una nueva etapa con tu hija y contigo misma: ayúdale a empoderarse para que pueda tomar sus propias decisiones y nadie decida por ella. Enseñale  a que puede. Dale todas las herramientas para que saque todo su potencial.

Crea una mujer segura de si misma capaz de llegar donde todo su potencial le empuje a llegar.

 

Cómo maltrata una madre narcisista

Cómo maltrata una madre narcisista

Debes de reconocer como maltrata una madre narcisista para confirmar que has sido abusada por ella y no culpabilizarte más.

Para mantenerte bajo su control, tu madre ha utilizado diferentes técnicas que te voy a pasar a enumerar a continuación. Las puedes encontrar detalladas en mi libro «Sobrevivir a una madre Narcisista. Cómo recuperarte de tus heridas infantiles y desplegar por fin tus alas».

Una vez más puede que tu madre no haya utilizado todas contigo, y puede que haya utilizado diferentes técnicas al mismo tiempo. Las madres tóxicas son bastante predecibles y tienen unos patrones de actuación muy similares unas de otras. Pero son personas únicas y no todas utilizan las mismas armas de tortura. Las irás reconociendo según las vayas descubriendo.

Técnicas que utiliza la madre tóxica para mantenerte bajo su control

  1. Infantilización
  2. Invalidación
  3. Gaslighting, la asfixia emocional
  4. No respeta tus límites personales
  5. Practica la triangulación
  6. Mina tus logros
  7. Utiliza un padre permisivo
  8. Practica la proyección
  9. Deflexión
  10. Intimidación. Te genera miedo
  11. Culpabilizar
  12. Síndrome de Munchausen por poderes
  13. Ley del hielo o Tratamiento de silencio
  14. Rechazo
  15. Explotación y violencia física
  16. Practica el Hoovering, trata de aspirarte
  17. Victimismo
  18. Venganza persecutoria, o acoso

Reconocer cómo te ha maltratado tu madre está bien porque sirve para abrir los ojos y confirmar que has sido maltratada. Pero no olvides que lo más importante eres tú, la víctima. Debes enfocarte en reconocer tus heridas emocionales que repites a pesar de la distancia o el tiempo y afrontarlas. Sabiendo que sigues repitiendo tus patrones emocionales, porque repites tu trauma infantil (transferencia del trauma de Freud), y entendiendo que lo haces porque eres adicta a tus emociones podrás sanar para por fin ser la mujer fuerte que eres y que nunca tu madre te ayudó a ver.

Ira Narcisista

Ira Narcisista

La ira narcisista, es la combinación de necesidades insatisfechas en las primeras etapas del desarrollo, junto con un entorno invalidante y un temperamento altamente sensible. Es una expresión primitiva, emocionalmente inmadura, de necesidades frustradas e invalidación (real o percibida) .

La ira narcisista no es una reacción al estrés del a persona tóxica, sino una reacción al temor subyacente de no satisfacer sus necesidades, no obtener su suplemento narcisista. Un temor tan grande que perdurará incluso después de que la amenaza desaparezca ( como expresa Sam Vaknin en su libro “Narcissism Revisited”).

La persona narcisista, está constantemente atenta a desaires, insultos, críticas o desacuerdos (reales o imaginarios), que experimenta como un rechazo y humillación y le hacen montar en cólera. La persona narcisista justifica sus reacciones de ira ya que cree que le provocan. Su distorsión cognitiva, o percepción errónea de la realidad, le hace ver que los demás le atacan de manera intencional. Su respuesta es una ira descontrolada.

La ira narcisista resulta incoherente para el que la padece

Por eso para la persona que sufre el abuso, su ira le resulta incoherente. Durante la ira, son propensas a gritar, distorsionar hechos y hacer acusaciones infundadas con malicia punitiva y llena de odio. La ira suele ser de corta duración, pero puede causar problemas devastadores para la persona a la que la dirige la abusadora.

Desafortunadamente, cuando los narcisistas se enfurecen, violan los derechos y la confianza de los demás

Confundidos y molestos, el objeto de su amor comienza a alejarse de ellos. Esto los pone aún más furiosos porque toda su identidad requiere atención para poder sobrevivir. La ira los deja sintiéndose más perdidos, culpables y sin valor.

La ira narcisista de tu madre te produce miedo

Su ira te asusta, y ella al ver el miedo en ti hace que se sienta que ha ganado, le hace aún más poderosa y en control de la situación. Su ira cubre sus distorsiones cognitivas, su desarrollo emocional detenido, su pensamiento blanco y negro, su falso yo, su grandiosidad, su necesidad de atención (incluso si es negativa), su necesidad de tener razón y su falta de empatía.

En resumen, la “ira” narcisista de tu madre tóxica, le sirve para defenderse de su mundo hostil, y hace que tu te alejes cada vez más.

No se puede hablar de la ira narcisista sin mencionar la herida narcisista ya que son como dos caras de una moneda

Están intrínsecamente unidas. La ira narcisista es la reacción a la herida narcisista cada vez que se percibe una amenaza a la autoestima de un narcisista.

La ira puede desencadenarse a partir de varias fuentes, pero el narcisista es especialmente hipersensible a cualquier sensación percibida de traición o abandono, lo que garantiza la apertura de viejas heridas parentales de la infancia (es decir, experiencias infantiles de pérdida de la autoestima, orgullo o vergüenza).

La pérdida del suministro narcisista experimentado en la infancia se convierte en un miedo patológico y generalizado en el narcisista adulto, un temor que los hace hipervigilantes ante cualquier daño narcisista posterior. Como consecuencia, las personas con trastorno narcisista de la personalidad, están siempre en un estado de vigilancia contra el ataque, buscando constantemente cualquier forma de desprecio hacia ellos (real o imaginaria), y si detectan “ser atacados”, sacan su ira narcisista. 

Con un ego tan frágil como resultado de una herida narcisista, el narcisista es fácilmente herido y humillado. Incluso los comentarios o actos más inocentes los puede malinterpretar como un intento de menosprecio a su persona.

Además de tener un ego frágil, también sufren de un ego inflado. Se perciben a sí mismos como una especie de genio superior que les da derecho a un tratamiento especial donde sea que vayan. También tienen una profunda convicción de que la mayoría de las personas son inferiores a ellos, que están celosas o les tienen envidia. Perciben que estas personas inferiores están decididas a «derribarlos», por lo que deben estar alertas en todo momento para protegerse de tal ataque.

Su necesidad de venganza es primordial, porque cada herida narcisista los llena de vergüenza y autodesprecio. En un intento de reconstruir su falso yo y la autoestima, recurren a su ira para restaurar su sensación de seguridad y poder. La ira de los narcisistas se compone de dos componentes; la primera capa es rabia hacia la otra persona, mientras que la segunda capa es rabia hacia sí mismos.

La herida narcisista de tu madre

Si esto que has leído lo traspasas a tu madre quizá puedas entender sus reacciones. Ella siente su ego y autoestima atacada, y de manera inconsciente para proteger su falso ego de grandeza desata su ira.

Sus fantasmas de la infancia vuelven a ella de manera inconsciente como nos explica Sigmund Freud en “Más allá del principio del placer». En esta obra Freud señala la repetición en la transferencia analítica del trauma infantil temprano. Nos dice en su obra que de adultos, reproducimos las situaciones dolorosas que ocasionaron nuestras heridas narcisistas.

Estas situaciones dolorosas o heridas desatan la ira de tu madre por la vergüenza que le produce su verdadero yo, y por el miedo que descubran su falso ser.

Comprender este proceso te a va servir para entender tu propia herida narcisista.

Porque no olvides que tu también te has protegido de la baja autoestima que han creado los abusos de tu madre, con la mismas herramientas que ha usado ella para cubrir sus propias heridas o miserias.

No olvides que tus heridas y rasgos tóxicos los puedes superar y dejar atrás para siempre y cuando los reconoces, entiendes que eres adicta a ellos. Sabiendo que siempre puedes modificar la adicción de la química de tus emociones aplicando el Método RAN©.

 

 

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