Crecer en una famila distorsionada donde tu madre tiene Trastorno Narcisista de la Persoalidad, te hace crecer con miles de limitaciones. Estas limitaciones que tu madre te marcaba no dejando desarrolar tu personalidad, quedan en tu mente y te acompanan en tu vida adulta aunque tu madre no este presente.
Es como la historia del elefante del circo. De pequeño encadenan su pata a un tronco. Tira y tira para librarse, pero al final desiste. Tanto, que cuando por su tamaño no tendría ningun problema en liberarse, no hace nada y permanece junto a la estaca, sin poder disfrutar del mundo, ya que en su mente grabaron que no tenía posibilidad de escape.
A nosotras nos pasa lo mismo que al pequeño elefante. Tantas veces nuestra madre nos hizo creer que somos inútiles, que no podemos hacer nada solas, que tenemos un carácter horrible, que somos odiosas, que somos feas, que nadie nos va a querer,…. que hemos grabado eso en nuestra mente y seguimos encadenadas a esos pensamientos. De niñas intentamos rebelarnos, decir lo que pensabamos, … pero desistimos.
Las cadenas de sus humillaciones, reproches, insultos, palizas,…. son mas fuertes que nosotras mismas.
Y como liberarnos de esas cadenas mentales? Primero el separanos del foco de nuestros males: nuestra madre. Y segundo y aquí está el trabajo más arduo, borrar esas cadenas de nuestra mente. Porque están solo ahí y solo nosotras podemos cortarlas.
No desistas. No te rindas. Aunque no lo consigas ahora eso no significa que no puedas hacerlo mañana. Piensa que borrar años de programacion negativa en tu mente no lo vas a conseguir en un día.
Pero te aseguro, que si no desistes conseguirás vivir sin cadenas.